El evento fue organizado por la Embajada de la República Checa en Santiago en colaboración con el Círculo Chileno Checo de expatriados checos, y a diferencia de otros años, la invitación se extendió a representantes del Ministerio de Relaciones Exteriores, Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, organizaciones de derechos humanos y al cuerpo diplomático entre otros.

Participaron el Subsecretario de Justicia, el Director del Departamento Europeo del Ministerio de Relaciones Exteriores, el ex y futuro Embajador de Chile en la República Checa, la Directora del Museo de la Memoria y de los Derechos Humanos, los Embajadores de Ucrania, Dinamarca, Países Bajos, Croacia, Costa Rica, Haití y otros miembros del cuerpo diplomático, también miembros de la comunidad de expatriados checos. Estuvo presente una mujer de la Embajada de la República Dominicana de nombre Lidice.

Al inicio del acto conmemorativo se escucharon los himnos nacionales de Chile y de la República Checa, luego el Embajador Pavel Bechný pronunció un discurso en el que destacó la importancia que tiene para el presente el legado de esta tragedia, especialmente conmovedora a la luz de la guerra en Ucrania. Señaló el simbolismo del monumento chileno, que representa el luche - un popular juego infantil conocido en todo el mundo y que simboliza así la conmemoración de la tragedia de los niños de Lidice. También recuerda a los niños como víctimas inocentes de los conflictos bélicos, de infancias despreocupadas y de juegos interrumpidos por la destrucción de la familia, el abandono del hogar y la muerte. El recuerdo de la tragedia del pueblo de Lidice debería ser una advertencia constante contra los conflictos bélicos en todo el mundo.

En su discurso, la Directora del Museo de la Memoria y de los Derechos Humanos, María Fernanda García, continuó su llamado por la importancia de conmemorar la tragedia de Lidice.

Después de los discursos, se invitó a los participantes del evento a colocar pétalos de rosas alrededor del monumento para honrar la memoria de las víctimas y recordar la fragilidad de la vida. Esta culminación del acto fue claramente el momento más emotivo, todos los invitados presentes quedaron visiblemente conmovidos. El exitoso evento finalizó con un pequeño coctel para todos los participantes.