Al inicio del acto solemne se entonaron los himnos nacionales de México, República Checa y Eslovaquia, seguidos por los discursos del Embajador checo Tomáš Hart y del Director de Vinculación de la Alcaldía Miguel Hidalgo, Alberto Burgo Maldonado. Los  oradores destacaron la amistad entre la República Checa y México y el legado histórico y moral de Masaryk. La calle Masaryk lleva el nombre del primer presidente checoslovaco desde 1936 gracias al decreto del entonces presidente mexicano Lázar Cárdenas, quien compartía respeto mutuo con Masaryk. 

El Embajador Tomáš Hart junto con Alberto Burgoa Maldonado depositaron flores en el memorial del TGM, por la República Eslovaca la Embajadora Terézia Šajgalíková acompañada por el Cónsul Ján Danečko, por la Asociación Tomáš Guarrigu Masaryk su presidenta Lada Veselá acompañada por la vicepresidenta de la Asociación Fátima Marshallová.

Al final, los participantes checos  interpretaron la canción favorita de Masaryk, Ach synku, synku.