Las celebraciones fueron organizadas en cooperación con la embajada por la Asociación Checa de Educación y Cultura - ACEC, para la cual la celebración de Mikuláš es un evento anual tradicional. En total, unas 60 personas se reunieron en el hermoso jardín.

El Embajador, Sr. J. Hlobil abrió el encuentro amistoso con un breve discurso, en el cual saludó a los presentes como el nuevo embajador. El nuevo cónsul, Sr. L. Hrúz se presentó también. Los compatriotas prepararon platos tradicionales checos como milanesas de pollo, ensalada de papa, carne de cerdo asada y como la cereza del pastel fue servido “svíčková omáčka s knedlíkem” (la salsa de lomo con pan esponjoso para acompaňar).

Luego aparecieron por fin Mikuláš, Anděl a Čert (San Nicolás, el Ángel y el Diablo), quienes eran esperados con ansias por los niños. Los niños más valientes recitaban poemas o cantaban villancicos, los más tímidos recibían un regalo sin aportar su granito de arena. Después de la experiencia de años anteriores, el Diablo fue muy gentil este año, porque especialmente los niños pequeños le tenían miedo.